jueves, 5 de junio de 2008

The static being


"A pesar de mi escepticismo me ha quedado algo de superstición."

Milan Kundera -La broma.

Esta mañana, mientras soñaba que no podía moverme, no me resultó curioso darme cuenta de que no me sentía extraño en esa situación: estaba acostado boca arriba, como dicen que uno sueña las pesadillas, acechado por un peligro que no me inquietaba en absoluto. No obstante, sospechando que soñaba, traté de despertarme, lo cual sólo conseguí con un gran esfuerzo. ¿Cuando estuve despierto? Eso es lo último que supe.

Antes de eso, padecí un leve influjo de conciencia, con dolor, con sentimiento de culpabilidad, con la familiar impresión de que había sido sustraído del lugar donde me había dormido y con la certeza de que, por el contrario de como había soñado, estaba boca abajo. Unos segundos más tarde, descubrí que estaba tan inmóvil como en el sueño, tal vez más inmóvil, como aplastado por un techo demasiado bajo, pero aun menos extrañado de la inmovilidad.

Hice un indolente esfuerzo por verificar si estaba tan inmovilizado como sospechaba: en efecto, estaba inexorablemente pegado a lo que supuse que era mi cama de todos los días pero que de momento experimentaba como un altar de mármol al cual me habían atado. Por más que lo intenté, nada me resultó inverosímil. Sí, podía estar a punto de ser sacrificado sobre un ara sagrada, algunos dioses ignotos pero compasivos podrían haber neutralizados mis miembros, incluso mis parpados, o simplemente podía haberme quedado paralizado por circunstancias fortuitas. Intenté moverme una vez más: no pude. Inventé una razón para quejarme: no me la creí.

Cuando finalmente me fue concedido abrir los ojos, descubrí la escena trivial de mi cuarto a mí alrededor, como si me envolviera, como si fuera eso que sentía que me estaba aplastando. Recuperé mi movilidad, sin mucho interés. Era un hecho bastante prosaico: la movilidad de uno.

Desde entonces no ha pasado mucho tiempo, pero me sorprendo con frecuencia ensayando siestas, unas tras otras. Algo me dice que tengo esperanzas en una inmovilidad más prolongada, más acorde a la realidad.


No hay comentarios: